miércoles, julio 18, 2012

Cinco categorías de morir

1. Muerte Natural: Queremos ser inmortales pero hay una muerte natural que nos espera al final de la vida, cuando nuestras células dejen de ser funcionales por el paso del tiempo. Incluso podemos decir que cuando nacemos empezamos a morir. Siempre he pensado que el ser humano no se merece el doloroso proceso del envejecimiento, después de haber gozado de la plenitud que se alcanza durante los años más vigorosos de la vida. Al ser el envejecimiento una fase de desencanto celular, todo nuestro cuerpo sufre los embates de esa caprichosa naturaleza y vamos perdiendo el sabor del dulce néctar de la vida. En un futuro no muy lejano quizás haya un cambio de planes, quizás haya otras opciones inventadas por el hombre. 2. Muerte por Enfermedad: Normalmente las enfermedades terminales son un proceso inherente al envejecimiento porque el sistema corporal se debilita y se asocia con las causas de una muerte natural. No obstante, hay enfermedades letales anticipadas. El ser humano no merece morir en estas condiciones, aún cuando se hable de calidad de vida. A veces las enfermedades nos llegan por descuido o porque un exquisito, pero a veces inconsistente esquema biológico, se equivoca y nos inserta errores en el ADN. 3. Muerte por Accidente: Un accidente mortal es una desgracia para la vida. No creo en "le convenía morir" u otra forma de falacias que solo conducen a la resignación. Un accidente es evitable, debemos cuidarnos porque los seres humanos no merecemos morir accidentalmente. Nadie tiene derecho de vivir tan alocadamente, que ponga en riesgo su vida o la de otro ser humano. Debemos cuidarnos porque las estadísticas demuestran, inobjetablemente, que no hay ángeles de la guarda. 4. Muerte por Homicidio: Creo que ninguna persona merece morir porque otra persona así lo decide. Esto es antinaturaleza. Toda vida es preciosa, ni siquiera la de la criatura más insignificante puede ser despreciada. Pero diariamente sucede y la gente desaparece, deja de existir para siempre. 5. Muerte por Suicidio: Ningún ser humano merece alcanzar un grado de desesperanza tal, que su único camino sea el autoexterminio. A veces pienso en esto, en las causas, en los motivos, en la desesperación que un ser humano puede experimentar para llegar a esta decisión, cuando todo apunta a la vida. Solo nos tenemos a nosotros mismos, como especie, para ayudarnos, protegernos y acompañarnos. A veces hay señales que podemos captar ... y actuar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

y muerte por desamor.. en esta muere el alma y nada vale la pena